La desigualdad y sus efectos en distintos ámbitos de la vida social ha sido y es un problema estructural en México. Ninguno de ellos es más relevante que otro, sin embargo, en lo que se refiere a lo educativo la desigualdad puede considerarse un gran lastre en la historia del país. En la literatura clásica y reciente se plantean cuestionamientos tales como ¿Igualdad de qué y para qué?, ¿Por qué preferimos la desigualdad? (aunque digamos lo contrario) y, sobre la Justicia ¿hacemos lo que debemos?, entre otros. Con ello se evidencia el preocupante contexto mundial en qué vivimos, cuyos problemas se han agudizado y visibilizado con la pandemia causada por el virus del Sars-Cov-2.